El campeonato ha dado muchas emociones, desde que los que causan sueño y los goles no llegan hasta los que ponen la piel de gallina de tantas emociones, así se vivió la victoria del Club Sport Cartaginés en Tibás ante el Deportivo Saprissa por dos a tres y el sueño de llegar a la fiesta grande del futbol costarricense cada vez está más cerca.
La última vez que se vieron fue hace meses en el Fello Meza y el empate a tres puso a muchos a vibrar por la alta intensidad que mostraron los equipos, cosa que ayer no fue la excepción con la diferencia que hasta el miedo rondó por el camerino blanquiazul.
Al minuto ocho los morados empezaron a defender su casa al estilo de Marvin Angulo, en tiro de esquina por la izquierda quedará la duda sobre si fue un remate o un centro al área chica, pero esto no importó para poner a celebrar a sus seguidores.
Ocho minutos después el estandarte de la provincia cartaginesa empataría el marcador en una genialidad creada por Fabrizio Ronchetti y Kevin Vega para que el capitán con la cabeza dijeran “aquí venimos a ganar”
A seis minutos de terminar la primera parte volvió la famosa “ley del ex” que un jugador le anote a uno de los equipos que militó, Mauricio Castillo se confabuló con Kevin Vega que andaba encendido para sacarse la marca de varios defensas y hasta a Carvajal para ponerse a la delantera.
La felicidad duró pocos minutos porque otro viejo conocido del camerino del Cartaginés empataría el marcador, hablamos de Christian Bolaños que un minuto después desde fuera del área anotó el segundo del Saprissa y por respeto al rival no celebró su gol.
Mientras se iniciaba el segundo tiempo, debajo de la gradería sur Fabrizio Ronchetti era llevado a una ambulancia y trasladado al Hospital Calderón Guardia ya que en una disputa por el balón se golpeó la cabeza con Francisco Calvo y por precaución del cuerpo médico decidieron sacarlo.
Cuatro minutos después de iniciado el complemento el balón le pegó accidentalmente a Adolfo Machado en el brazo izquierdo y el central Andrey Vega marcó la pena máxima en medio de polémica y hasta Carlos Watson expulsado por reclamar. El encargado de anotar fue Randall Brenes y el verdugo morado puso el definitivo dos por tres.
Lamentablemente el capitán del Cartaginés abandonó el campo de juego tras chocar con David Guzmán y caer de forma aparatosa con el cuello, de nuevo la Cruz Roja volvió a hacer su trabajo al llevarlo al hospital.
